Valencia, la ‘tech city’ que retiene y atrae talento innovador

La ciudad de Valencia, con sus más de 800.000 habitantes, se sitúa como la tercera ciudad más poblada de España y como centro neurálgico y estratégico del levante español. El tren de alta velocidad, su gran red de autovías y el Aeropuerto Internacional de Valencia conectan a esta ciudad cosmopolita no solo con el resto del país, sino con el mundo entero.

Como ciudad con playa y muchos días de sol, la economía se sustenta en gran parte en el turismo, llegando a alcanzar los casi 2 millones y medio de turistas extranjeros en 2019, su año récord hasta el momento. Pero, como sucede con Málaga, la ciudad esconde un potencial cultural, innovador y empresarial que no debe quedar eclipsado por el turismo.

Con 836 ‘startups’ registradas en la región, el ecosistema emprendedor ha experimentado un gran crecimiento a lo largo del último lustro gracias a que el interés por hacer de Valencia un polo de innovación no llega desde un solo frente, sino desde los principales actores sociales: Generalitat, ayuntamiento y empresas.

Una ciudad que convence a la innovación

El primer motivo que lleva al talento local a quedarse en su tierra innovando es, precisamente, lo que convence al turista para visitar la ciudad. Así lo aseguran desde el Ayuntamiento de Valencia. “Nosotros vendemos un binomio entre la calidad de vida y el coste. Es más barato vivir aquí que en Barcelona o Madrid, y la calidad de vida es mayor en parte por esto y porque es una ciudad grande pero donde todos los servicios quedan a mano de la ciudadanía”, explica Javier Mateo García, subdirector de emprendimiento de Fundació València Activa.

Esta característica no solo convence a la gente de Valencia para quedarse, sino que también atrae a ese talento extranjero que busca un lugar donde crecer como profesional. “Gracias a las inversiones de los últimos años para convertir la ciudad en un ‘hub’ tecnológico, el talento de fuera se interesa cada vez más por Valencia. Llegan ‘startups’ de todo el mundo dispuestas a establecerse y crecer, a cambiar el mundo desde Valencia”, especifica Mateo.

Y en esa misma línea opina Nacho Mas, director ejecutivo de Startup Valencia, una de las organizaciones que más impulsan el ecosistema emprendedor en la ciudad: “Valencia no es solo la ciudad idónea para emprender e innovar, además ofrece un estilo y calidad de vida que no se encuentra en otros ‘hubs’ de mayor escala. El tamaño de la urbe, su situación geográfica, conexiones, cultura y clima son añadidos que hacen de nuestra ciudad un lugar donde quedarse a innovar”.

Programas, concursos, formaciones y eventos que potencian al emprendedor

La misión en común por parte de los principales actores de la comunidad autónoma surgió a principios de 2015, cuando instituciones y entidades privadas vieron que el futuro de la región tenía que pasar por convertirse en una ciudad tecnológica europea donde se cuidase al talento.

“Si bien el gen de la innovación y las ganas de crecer llevan años con nosotros, podríamos decir que fue a partir de ese año cuando aunamos fuerzas para que el talento y el conocimiento se quedara en la ciudad, potenciándolo y dando las herramientas para que Valencia se convirtiese en una ‘tech city’”, rememora Mateo.

Para ello, las incubadoras, aceleradoras y otras organizaciones han ido desarrollando todo tipo de programas, premios, eventos y cursos que, de una forma u otra, pudieran hacerle la vida más fácil a las ‘startups’ que comenzaban su aventura profesional.

Lanzadera, una de las aceleradoras e incubadoras más importantes de Valencia, y Startup Valencia, que organiza anualmente el Valencia Digital Summit, son dos ejemplos de plataformas para ‘startups’ en Valencia

Lanzadera, importante aceleradora e incubadora valenciana creada por el empresario Juan Roig, tiene varios programas pensados para ayudar a estos proyectos, tanto a los que están en fase semilla como a los que se encuentran en pleno desarrollo:

• Fase Start, que ayuda a las personas que tuvieron una buena idea pero no pudieron explotarla por culpa de la crisis.
• Fase Traction, que se dirige a proyectos ya iniciados donde los emprendedores reciben acompañamiento y apoyo para empezar a vender a mayor magnitud y a desarrollarse de una forma escalable.
• Fase Growth, que busca hacer crecer a empresas que ya han consolidado su modelo de negocio.
• Fase Scale Up, dirigido a empresas más maduras pero que necesitan ayuda para abordar nuevas metas y escenarios.

El director general de Lanzadera, Javier Jiménez, cree que “el emprendimiento es fundamental para el progreso y la innovación de la sociedad”. Por eso, además de los programas, la aceleradora ofrece ayudas que van desde los 1.000 euros hasta una financiación por valor de 500.000 euros para aquellas ‘startups’ que entran en Lanzadera.

Por su parte, en Startup Valencia llevan desde 2018 organizando anualmente el Valencia Digital Summit, una plataforma que brinda la oportunidad a las ‘startups’ de interactuar y dar a conocer sus proyectos ante corporaciones y fondos de inversión nacionales e internacionales.

Por el lado de la administración, el ayuntamiento se ha centrado en la parte formativa y burocrática, ayudando a todos aquellos emprendedores que han necesitado consejo, formación o asistencia técnica, como puede ser “censar la empresa, darse de alta en el RETA o resolver dudas fiscales”.

Observatorio Startup Comunidad Valenciana, VLC Startup Awards, Capital4Startups.org, Corporates4Startups, Valencia Investors Day, Tech Transfer o el Ciclo El Mundo que Viene son algunas de las iniciativas que se llevan a cabo a día de hoy en Valencia gracias a la colaboración de todos estos actores.

El talento que se queda y el talento que llega

Y tras tantas iniciativas, los casos de éxito. Flywire es una ‘fintech’ fundada por el valenciano Iker Marcaide y que ha empezado a cotizar en el Nasdaq, la bolsa americana de la industria tecnológica. Su idea es una solución de pago fácil de usar que ofrece a los pagadores la posibilidad de utilizar su moneda local desde el extranjero, seguir el estado de las transacciones y atención 24 horas en diferentes idiomas para solucionar cualquier duda. En su origen empezó como una ‘app’ pensada para estudiantes de intercambio.

Y si seguimos hablando de jóvenes, los creadores de Jeff llegaron con 28 años a Valencia recién salidos de la universidad y tuvieron una idea revolucionaria: una aplicación para móviles que ofrece servicios de lavandería a domicilio con tarifas competitivas. Actualmente tienen 1.200 franquicias repartidas por una docena de países.

Y en el sector ‘fintech’ destaca Afterbanks, una ‘startup’ especializada en el desarrollo de APIs bancarias que opera en ocho países, soporta más de 100 bancos y que tiene más de 20.000 usuarios. Su ventaja es que desarrolla una tecnología que permite aunar en una sola plataforma a clientes y empresas para que puedan ver los movimientos bancarios de la cuenta corriente y la facturación de negocios.

Esta ‘startup’, que realizó el pasado año un Fast Track con BBVA dentro de las iniciativas de Open Innovation en el que se buscó mejorar la plataforma de agregación financiera del banco para ofrecer mejores servicios, es ejemplo del talento que encuentra en Valencia el lugar donde crecer. Así lo explica David Lozano, director general de Afterbanks. “Nosotros surgimos en Madrid, pero tuvimos que buscar un lugar donde nos pudieran ofrecer buenas condiciones para desarrollar nuestro negocio. Ese lugar fue Valencia, principalmente gracias a Lanzadera, que nos abrió los brazos ayudándonos muchísimo, pero también por la ciudad, que se está convirtiendo en una gran ‘hub’ tecnológico que ofrece calidad de vida”.

El talento y la innovación no dejan de viajar y de moverse, las ideas no están quietas y Valencia es un destino idóneo para acoger una infraestructura que ofrezca todo lo necesario para ello. La urbe que alberga a la Ciudad de las Artes y las Ciencias también acuna ahora, gracias a iniciativas de actores públicos y privados, a empresas emergentes que la convierten en la ciudad de la innovación abierta.